Biografía
José Saturnino
Osornio Ramírez, un gobernador de Querétaro nacido en El Sitio, San Juan del
Río., Querétaro. (29 de noviembre de 1896 - San Juan del Río, 28 de diciembre
de 1976). En el año 1930 el Partido Nacional Revolucionario (PNR), o dicho de
otra manera más adecuada, Plutarco Elías Calles, como Presidente de la
República, postuló e impuso en la gubernatura de Querétaro a un líder campesino
de origen pobre, que había nacido en El Sitio, Municipio de San Juan del Río: José
Saturnino Osornio Ramírez., El caso de la elección de Osornio fue excepcional,
debido a que él fue el único candidato para la gubernatura de Querétaro. La
elección fue entre Osornio y Osornio. En este caso el centro federal fue cínico
en su imposición, y ni siquiera hubo un combate simulado entre varios
candidatos. Así que Saturnino Osornio tomó posesión de la gubernatura de
Querétaro el 1 de octubre de 1931, y fue el único gobernador de este periodo
que provenía de la clase pobre. Para las clases rica y media de Querétaro,
especialmente para las de la capital del estado, la designación de Osornio fue
uno de los rasgos más amargos que les dio el régimen de Elías Calles. La
osorniada, como le llamó con desprecio la élite queretana al gobierno de
Osornio, para abrir boca cerró el antiguo y prestigiado Colegio Civil, debido,
según cuentan, a que no se plegó a las extrañas disposiciones del gobernador
respecto a los horarios escolares. El gobernador, a la hora de explicar el
cierre del Colegio Civil, escribió sin ambages: "Los jóvenes alumnos del
Colegio Civil eran hijos, en su mayor parte, de gente adinerada y enemiga de la
Revolución". Por otra parte, Osornio también determinó que los préstamos
deberían cobrar como máximo el uno por ciento de interés, para evitar la usura
y el agio a costa de los pobres. Pero lo que resintió con mucha intensidad
fueron las medidas anticlericales y antirreligiosas de Osornio. Hubo persecución
religiosa como no se había dado en Querétaro anteriormente, ni siquiera en los
tiempos de la guerra cristera, como expulsión de sacerdotes, encarcelamiento de
fieles, ocupación gubernamental de edificios del clero y demás. Los templos
queretanos fueron clausurados en 1933, algunos aseveran que esto no fue por lo
anticlerical, sino que fue una medida para evitar la propagación de epidemias
que en aquella época asolaban la nación y el principal foco de infección,
debido al tumulto, eran las escuelas como las iglesias. Esto disgustó a la
generalidad de los queretanos, incluyendo a los pobres. Uno de los puntos de
choque fue la educación socialista que el gobierno trató de imponer a los
queretanos, quienes reaccionaron con determinación contra esta medida, no
enviando a sus hijos a las escuelas, y denostando al gobierno cada vez que
tenían oportunidad. Las escuelas tradicionales siguieron funcionando
clandestinamente.
Al
parecer, ni José Saturnino Osornio Ramírez entendió los alcances de su posición
política, ni los queretanos privilegiados hicieron un esfuerzo grande por
comprender y negociar con el gobernador; todo esto mientras Elías Calles le
devolvía a Querétaro, en trono revanchista, los golpes que le había dado a su
régimen de rebelión cristera. Las relaciones entre la osorniada y los
queretanos era un diálogo de sordos, con la complaciente manipulación del Jefe
Máximo.
Es
sorprendente que el periodo de José Saturnino Osornio no hubiera terminado en
un levantamiento armado. Otro aspecto decisivo en la gubernatura de Osornio fue
su activa política agraria de reparto y restitución ejidal. Este fue un asunto
complejo, pues por una parte se dio respuesta a una de las demandas más
radicales de la Revolución: el reparto de la tierra, con lo que se dio un reconocimiento
popular a Osornio, pero por otra parte se castigó a los hacendados, a quienes
se les achacó ser reaccionarios contrarios al régimen.
Hay
que subrayar el origen y desempeño agrario de José Saturnino Osornio Ramírez